domingo, 14 de octubre de 2012
Este libro no debe ser destruido
"Montag no hizo nada. Fue su mano la que actuó; su mano, con un cerebro propio, con una conciencia y una curiosidad en cada dedo tembloroso, se había convertido en ladrona. En aquel momento metió el libro bajo su brazo, lo apretó con fuerza contra la sudorosa axila; salió vacía, con agilidad de prestidigitador." (Fahrenheit 451, Ray Bradbury)
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario