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Es igualmente el delirio de los niños, que desde siempre hicieron agua de su boca y entornaron suaves los párpados pensando en casas y fábricas comestibles.
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Trampa de glotones y artificio de delicadezas, ¿quién no ha sucumbido a sus encantos?¿quién no se contagia de su risa?
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De los inmensos descubrimienos que España trajo a Europa, cuyos secretos desde Moctezuma al Marqués de Sade recorren nuestra historia.
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¿Acaso es sólo un alimento aunque sea para los dioses? No, no... es el símbolo de la tentación de los placeres de la vida, unos placeres que recuerdan a nuestra alma el hermoso cuerpo en el que vive.
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Un alimento que nos avisa de la petite mort, el delicioso orgasmo femenino, un precioso caligrama en movimiento que deja tres sensaciones: chocolate, chocolate, chocolate.
Laura Esquivel, Como agua para chocolate.
Roald Dahl, Charly y la Fábrica de chocolate.
Maximiliano M. Monje, Los bombones.
James Runcie, El secreto del chocolate.
Joanne Harris, Chocolat.
2 comentarios:
Me encanta disfrutar de leer un buen libro, y por eso trato de buscar acerca de diversos autores para conocer nuevos libros para obtener. Muchas veces me quedo en casa comiendo algo que encargo al delivery providencia y a la vez leo algo
no hay nada mas delicioso que mezclar la lectura con la comida, todos estos libros tienen esa delicia...saludos excelente blog. mas noticias
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