Puede que la gente conozca más a Francisco Umbral por su famoso enfado "he venido a hablar de mi libro" que protagonizó en televisión junto con Mercedes Milá, que por ser autor de Las Ninfas. Y puede además que no case ese personaje energúmeno con el autor sensible y exquisito que deducimos de la lectura de su magnífica novela. Algo parecido podría decirse de Cela o de Fernán Gómez. ¿Cómo son los escritores en persona? ¿Son iguales a cómo los imagina uno leyendo sus obras? Está claro que son como el común de los mortales, pero parece probable que se distancien en cierta medida del tópico del escritor comedido y academicista y no responda a la imagen que nos hagamos al leerlo.
En la enseñanza, la corriente estilística produjo un cambio notable en el estudio, desplazando el punto de interés a la obra literaria misma, sin embargo, no ha podido sustraer a la educación del interés por la biografía de los autores y autoras. La razón es bien sencilla, quien lee, quiere un libro vivo y la vida de los libros no emana de sus personajes solamente, sino de los autores que los escribieron. A veces una manera de captar el interés del alumnado por un texto se consigue ligándolo a la biografía de su autor o autora.
En estos años, nuestro Instituto ha sido visitado por numerosos autores, generalmene novelistas y muchos poetas. Cada visita ha tenido su particular desarrollo, pero no podemos negar que algunas personas, además de saber escribir, saben enganchar al público, metérselo en el bolsillo y llevárselo de calle.
Jordi Sierra i Fabra: un showman, espectacular, arrollador. Entró en el salón de actos algo tarde y la muchedumbre que lo esperaba quedó pronto atrapada y después no se hablaba de otra cosa. ¡La visita de un escritor se convirtiró en conversación cotidiana en el pueblo esa tarde! Anduvo por la sala, gritó, saltó, representó histriónicos papeles cómicos, confesó terribles problemas de su infancia, dejó un mensaje eterno de superación: cuando comentó de pequeño que quería ser escritor, la profesora de lengua se rió de él. Tenía muchísimas faltas de ortografía, superó una indomable tartamudez y se convirtió en el autor con más libros simultáneamene en el mercado, entre otros records. Una verdadera inyección de fuerza que contagió a todos los presentes a la salida. No en balde, ha demostrado que conoce a la perfección a los adolescentes, como se pone de relieve en la magnífica novela Rabia, un retrato perfecto de la edad del mejor pavo (citar sus obras sería competir con el listado de Lope de Vega).
Care Santos es probablemene la escritora que más nos ha visitado. Cada vez que viene, recordamos que es año tras año uno de los éxitos de lectura. Okupada, Te diré quién eres, Operación Virgo , Los ojos del lobo... son libros que pasan de mano en mano a veces con disgusto de la biblioteca que pierde el control. La última vez que vino Care -simpática, decidida, cercana, como siempre- nos reunimos en turnos para hacer los encuentros más íntimos. Respondía por turnos la rueda de preguntas (estábamos en círculos además). Al día siguiene, una alumna de pobres resultados académicos, vibraba de alegría porque a Care le había parecido genial el final alternativo que había propuesto a su novela Laluna.com (una versión actual y juvenil del Cirano).
Y también hemos tenido poesía, mucha poesía, alguna tan especial e inolvidable como la de Juan Carlos Mestre. Ante el salón abarrotado, frente a un escuálido atril con los textos, recitó con su hermosa voz unos poemas deslumbrantes -Las estrellas para quien las trabaja- mientras tocaba un monocorde y melancólico arcordeón. -¡Los vellos de punta!- decían muchos al terminar. Y como es pintor, remató la espléndida faena no sólo firmando a los asistentes los ejemplares de nuestro cuaderno de poesía de ese año, sino haciéndole un dibujo de auténtico calígrafo a cada uno de los chavales y chavalas.
Inolvidables, todas, todos. En ocasiones, nada puede sustituir a la presencia viva, ni siquiera los libros que la justifican.
1 comentario:
LA VIDA DE LOS ESCRITORES ES DURA Y LARGA PARA LOGRAR EL EXITO, O COMO MENOS EL RECONOCIMIENTO DEL LECTOR QUE LE PUEDA ENGANCHAR UNA DETERMINADA OBRA, O TENGA LA SASTIFACCION DE QUE AL ESCRIBIR ALGUIEN LEA, LO QUE REFLEJA EN LAS PAGINAS QUE TOMÓ EN BLANCO Y LAS RELLENÓ DE LINEAS NEGRAS TRATANDO DE DECIR LO QUE SENTIA, QUIZAS O LO QUE IMAGINABA, O HABIA SOÑADO..
SUS DELIRIOS, O SUS DESENGAÑOS.
TODO COMO EL QUE PARE UN HIJO,LARGO TIEMPO DE GESTACIÓN, Y PERDER EL CONTACTO... AL DIA SIGUIENTE, DEL ALUMBRAMIENTO.
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